Delito de homicidio doloso
En qué consiste el delito de homicidio doloso
El delito de homicidio doloso es una de las formas del delito de homicidio (artículo). Está regulado en el artículo 138 del Código Penal español.
Conducta tipificada:
- Será castigado el que matase a otro, como reo de homicidio.
Pena:
- Prisión de 10 a 15 años.
- Pena superior en grado:
- Víctima menor de 16 años o persona especialmente vulnerable por razón de edad, enfermedad o discapacidad.
- En caso de ser subsiguiente a un delito contra la libertad sexual.
- Pertenezca a un grupo u organización criminal.
- Cuando los hechos sean además constitutivos de delito de atentado contra la autoridad, sus agente y los funcionarios públicos.
Características
Requisitos:
Es necesario que haya «animus necandi», esto es, que el sujeto activo tenga la intención de matar a otra persona.
Diferencia entre «animus necandi» y «animus laedendi»
- Animus necandi: Intención de matar a otra persona.
- Animus laedendi: Intención de lesionar a otra persona (se castigo como delito de lesiones y no de homicidio).
Dificultad para juzgar la clase de ánimo
Los jueces y tribunales disponen de una serie de criterios para decidir qué tipo de ánimo tenía el sujeto activo. Estos criterios son:
- Tipo de arma utilizada.
- Lugar donde se infirieron las lesiones.
- Número e importancia de las lesiones.
- Relaciones previas entre el autor y la víctima.
- Otros criterios.
Sin embargo, a pesar de seguir estos criterios, en ocasiones puede resultar una tarea complicada para el juzgador resolver qué tipo de ánimo tenía el autor.
Consumación del delito:
- Cuando se produce la muerte de la víctima.
- Cabe la tentativa, cuando se produzcan lesiones.
Tipo de dolo:
- Puede ser directo o eventual.
Error:
El sujeto puede incurrir en dos tipos de errores.
- Error en el golpe (aberratio ictus):
- El que quiere matar a una persona con una pistola, se desvía el tiro y mata a otra persona aleatoria. Se considera que existe voluntad de matar.
- Error en la persona (error in persona):
- El autor, creyendo que iba a matar a una persona en concreto, se equivoca de identidad y mata a otra distinta.